Esta soy yo, son mis pensamientos, mis ilusiones, mis sueños en definitiva, os presento mi mundo, que espero que os guste y seáis muy felices en mi pequeño rincón de la fantasía y la magia...

lunes, 18 de agosto de 2014

SI EL AMOR DUELE...

Fue una velada deliciosa, habían salido a cenar como tantas otras veces y volvían abrazados disfrutando de la hermosa noche de verano.
Romeo y Alexia llevaban muchos años juntos, prácticamente toda la vida. Se conocieron en el instituto y de una gran amistad surgió el amor.
Vivían en un pequeño acogedor y muy agradable.
Llegaron a casa con una animada charla entre risas y aspavientos que provocaron sonoras carcajadas mientras abrían la puerta.
Romeo se acordó de pronto del encuentro que tuvo aquella misma mañana con Javier un amigo común del Instituto con el que los primeros años formaron un trío inseparable,después la Universidad y la vida, les distanció.
Javier estudió química y terminó trabajando en un importante laboratorio de investigación. Hacía tiempo que no se encontraba con él, hasta esa misma mañana.
−Tuvo un comportamiento extraño, decía cosas incongruentes y repetía las cosas una y otra vez sin sentido aparente. Se puso muy pesado hasta que consiguió que subiese a su casa y tomase un vino. Era elaborado por él mismo y se sentía muy orgulloso de ello.
−Me pasó a mi lo mismo. Hasta que no tomé el vino no paró y no era nada del otro mundo.
Dijo Alexia divertida.
−Me repitió hasta la saciedad una frase...
−¡sii! A mi también
Y los dos entre risas repitieron la frase, mientras preparaban un café y estallaba en una carcajada.
−¡si el amor duele, no es amor!
Y se sentaron en la mesa uno frente a otro mirándose a los ojos lanzándose un beso al aire.
Romeo se levantó hasta el cajón de los cubiertos y rodeó la esquina de la mesa y se plantó ante ella. Extendió la mano izquierda y le levantó la barbilla.
Con la mano derecha y con un golpe certero le clavó un tenedor en el ojo. Alexia no gritó ante la sorpresa se limitó a abrir el ojo que le quedaba sano y mirarle fijamente con un gran interrogante en el rostro, mientras con una mano se limpiaba el líquido viscoso que resbalaba por su cara.
Romeo se acercó más a ella y con una servilleta comenzó a ayudarla, con mucho esmero tapando la cuenca vacía y desincrustando el tenedor. Ella se dejaba hacer sin dejar de observarlo. Cuando hubo terminado acercó su boca a los labios de ella para besarla.
Ella abrió su boca para recibirlo y le devolvió un beso con mucha pasión, los labios se buscaban, los dientes chocaban con furia, las lenguas se entrelazaban formando sólo una con una desesperación enfermiza.
Alexia atrapó con sus dientes la lengua de Romeo y sujetàndola con fuerza dio un fuerte tirón  arrancàndosela de cuajo, sacando a su vez parte del esófago, que quedó colgando de sus dientes, retorciéndose como una serpiente atrapada por la cabeza.
Romeo no dijo nada, ya no podía, pero tampoco podía dejar de mirarla como escupía aquel trozo de carne inerte que colgaba de su boca y lo deposita en el cubo de la basura, en el apartado de basura orgánica al igual que se lo había visto hacer miles de veces al recoger la cocina.
Él se limpió el chorro de sangre que emanaba de su boca, se quitó la camisa para meterla en la lavadora.
Se acercó a su mujer atrayendola hacia él, en un cálido abrazo que ella aceptó de buen grado aferrándose a su cuello con todas sus fuerzas. Èl con sus fuertes brazos la alzó, como si se tratase de un bebé y se dirigió con ella a la habitación.
Encendió la luz, le apartó el pelo de la cara acariciandola con mucha ternura, ella le sonrió y con un impulso rápido y seco, la lanzó por la ventana. Ella lejos de gritar, oasustarse, se aferró más a su cuello, haciendo que perdiese el equilibrio y cayese con ella en un abrazo mortal.
Al día siguiente los titulares en los periódicos decían lo siguiente:
"Aparecen los cuerpos de dos jóvenes abrazados en la acera de su edificio. Según fuentes policiales y después de las primeras investigaciones, tras el brutal y sádico asesinato, se sospecha de una banda de sanguinarios Albano−kosobares, expertos en torturas, aunque aún se desconoce el movil, podría tratarse de un ajuste de cuentas ya que no fue forzada la entrada a la vivienda."
Los vecinos no daban crédito a lo que había sucedido  y no dejaban de repetir:
━Se querían tanto.. y eran tan normales...
Javier con el periódico en la mano caminaba por la calle con un soniquete interminable en el que repetía sin parar:
−− si el amor duele no es amor, si el amor duele no es amor......